Mindfulness para una vida plena
Mucho se está hablando en diversos ámbitos de la meditación, y todas las bondades que trae consigo su práctica regular. Sobre todo, se habla de un concepto que ha llegado algo tarde a España, y del que están emanando una gran cantidad de estudios empíricos que apoyan su práctica y refuerzan sus beneficios. Hablamos de Mindfulness.
¿Qué es Mindfulness?
Mindfulness ha sido descrito como una conciencia centrada en el presente, no elaborativa y no enjuiciadora, en la cual cada pensamiento, sentimiento o sensación que surge en el campo atencional es reconocido y aceptado tal como es (Kabat-Zinn, 1990; Segal, Williams y Teasdale, 2002; Shapiro y Schartz, 1999). Actualmente se admite de forma común que Mindfulness se origina en la tradición budista, siendo un término proveniente de la traducción al inglés del vocablo “Sati”, que implica “conciencia, atención y recuerdo” (Siegel, Germer y Olendzki, 2009) y cuyo significado es el de atención recta, Samma-sati (Thera, 1962). A la dificultad que supone la traducción del vocablo Sati al inglés, hay que añadir la que supone su traducción al español, aunque actualmente las expresiones “Atención Plena” y “Conciencia Plena” son las predominantes en el ámbito académico psicológico.
En la actualidad Mindfulness se ha definido de muchas formas, aunque quizás la más conocida es la de Kabat-Zinn (1994), que afirma que “Mindfulness significa prestar atención de una manera especial: intencionadamente, en el momento presente y sin juzgar”. En 2003, el mismo autor la describió como la conciencia que emerge a través de poner atención en el momento presente, con un propósito y sin enjuiciar, a la experiencia que se despliega momento a momento.
Respecto a la caracterización del término Mindfulness, ésta puede ser de varias formas según Germer (2005); como una práctica para cultivar la atención (meditación), un proceso psicológico (ser consciente) o como un constructo teórico (Mindfulness). Generalmente cuando se hace referencia a la meditación con el término Mindfulness se está haciendo referencia a la meditación Vipassana (en inglés awareness o insight meditation) o a la meditación Zen, siendo varios los programas que utilizan la práctica formal de éstas, entre los que destacan el programa de reducción del estrés basado en Mindfulness (Mindfulness-based stress reduction, MBSR; Kabat-Zinn, 1990), la terapia cognitiva basada en Mindfulness para la prevención de recaídas en depresión (Mindfulness- based cognitive therapy, MBCT; Segal, Williams, y Teasdale, 2002) y el programa de prevención de recaídas basado en Mindfulness (Mindfulness-based relapse prevention, MBRP; Marlatt y Donovan, 2005).
Componentes fundamentales de Mindfulness
Bishop et al. (2004) publicaron una propuesta de definición operativa de Mindfulness bajo el marco de un modelo que contempla dos componentes fundamentales en Mindfulness, como son la autorregulación de la atención hacia el momento presente y la actitud de curiosidad, apertura y aceptación de la experiencia en el momento presente.
La autorregulación implica desarrollar un tipo de conciencia (Awareness) no elaborada de pensamientos, sentimientos y sensaciones. Mindfulness comienza cuando llevamos el “darnos cuenta” (Awareness) a la experiencia presente, observando y prestando atención a las fluctuaciones de nuestros pensamientos, sentimientos y sensaciones, lo que implica la vivencia de una experiencia directa de los eventos que ocurren en la mente o en el cuerpo, en un momento determinado (Teasdale, Segal y Williams, 1995).
Por otro lado, el segundo componente del modelo se refiere a cómo se autorregula la atención hacia el momento presente, adoptando una actitud de curiosidad, apertura y aceptación de la propia experiencia que se vivencia en el momento presente. Es importante resaltar que Mindfulness no solo aparece con el primer componente de autorregulación de la atención, que es necesario pero no suficiente. El cómo se autorregula la atención es fundamental e incluso hay evidencia de que ciertas formas de autofocalización de la atención pueden agravar el distrés y aumentar o mantener la psicopatología (Nolen-Hoeksema, 1991).
Desde este marco, en la práctica de Mindfulness se establece un compromiso de mantener una actitud de curiosidad ante las divagaciones de la mente, cuando de forma inevitable se aleja del momento presente. Todos los pensamientos, sentimientos y sensaciones que surgen en el curso de la experiencia están sujetos a la observación, desarrollando una aceptación hacia la propia experiencia en cada momento.
La aceptación ha sido definida como estar experiencialmente abiertos a la realidad del momento presente (Roemer y Orsillo, 2002). Otra definición de aceptación es la que elabora Hayes (1994) que enfatiza la importancia de incluirla en el proceso terapéutico, “experimentar los eventos plenamente y sin defensas, tal como son”. Como afirma Vallejo (2006), centrarse en el momento presente, lo cual implica la autorregulación de la atención, es una característica que ha sido definitoria del análisis funcional de la conducta, y en consecuencia de la terapia de conducta. En contraste a esta coincidencia, en la aproximación Mindfulness no se busca tanto el control, al menos de modo directo y en primer término, sino la aceptación de las experiencias y sensaciones tal como se perciben. Asimismo, en contraposición a la búsqueda de control, la aceptación erróneamente se podría confundir con resignación, pasividad o indiferencia.
Beneficios
Por todo ello, la práctica de Mindfulness está siendo una técnica con una gran presencia en la actualidad, reportando una gran variedad de beneficios en la práctica clínica, como se afirma en diversas revisiones, a destacar las de Bishop (2002); Baer (2003), Dimidjian y Linehan (2003); Grossman et al. (2004); Keng, Smoski y Robins (2011).
En general todas estas revisiones llegan a la conclusión de que las intervenciones basadas en Mindfulness arrojan efectos beneficiosos en una gran variedad de condiciones médicas y psicológicas, aunque se requieren más investigaciones que puedan confirmar y ampliar los hallazgos obtenidos hasta el momento. En concreto Minfulness y sus terapias afines presenta diversos resultados satisfactorios para mejorar la salud general y el afrontamiento del estrés (Gutiérrez, 2011; Majumdar, Grossman, Dietz-Washchkowski, Kersig y Walach 2002; Rosenzweig, Reibel, Greeson, Brainard y Hojat, 2003; Chang et al., 2004).
Referencias
Kabat-Zinn J. (1990). Full Catastrophe Living. New york: Delta. [Trad. cast.: Vivir con plenitud las crisis. Barcelona: Kairós, 2003].
Segal, Z. V., Wiliams, J. M. G. y Teasdale, J. D. (2002). Mindfulness-based cognitive therapy for depression. Nueva York: Guilford Press. [Trad. cast.: Terapia cognitiva de la depresión basada en la conciencia plena: un nuevo abordaje para la prevención de las recaídas. Bilbao: Desclée de brouwer, 2006].
Shapiro, S. y Schwartz, G. (1999). Intentional systemic mindfulness: An integrative model for self-regulation and health. Advances in Mind-Body Medicine, 15, 128-134.
Siegel, R. D., Germer, C. K. y Olendzki, A. (2009). Mindfulness: What is it? where did it come from?. En F., Didonna. Clinical Handbook of Mindfulness. Springer: New York.
Thera, N. (1962). The heart of Buddhist meditation: A handbook of mental training based on the Buddha’s way of mindfulness. London: Rider and Company. [Trad. cast.: El corazón de la meditación budista. Barcelona: Cedel, 1992].
Kabat-Zinn, J. (1994). Wherever you go there you are: Mindfulness meditation in everyday life. Nueva York: Hyperion.
Germer, C. K. (2005). Mindfulness and psychotherapy. En C. K., Germer, R. D. Siegel y P. R. Fulton (Eds). Mindfulness: What is it: What does it matter? (pp. 3-27). New York: Guilford Press.
Marlatt, G. A. y Donovan, D. M. (2005). Relapse prevention: Maintenance strategies in the treatment of addictive behaviors. New York: Guilford Press.
Bishop, S. R., Lau, M., Shapiro, S., Carlson, L., Anderson, N. D., Carmody,… Devins, G. (2004). Mindfulness: A proposed operational definition. Clinical Psychology: Science and Practice, 11, 230-241.
Teasdale, J., Segal, Z. y Williams, J. (1995). How does cognitive therapy prevent depressive relapse and why should attentional control (mindfulness) training help?. Behaviour Research and Therapy, 33, 25-39.
Nolen-Hoeksema, S. (1991). Responses to depression and their effects on the duration of depressive episodes. Journal of Abnormal Psychology, 4, 569-582.