Es completamente normal que tanto niños como adultos, experimenten miedo o incertidumbre durante los eventos estresantes causados por la pandemia a nivel mundial del corona virus.
El miedo es una emoción muy útil y poderosa. Es la emoción que nos protege del peligro. Hoy en día, muchos de los peligros, no dependen de nuestras experiencias. Muchos de esos peligros los aprendemos a través de las noticias, de los mensajes que circulan por redes sociales…que en muchas ocasiones son exagerados y sacados de contexto. Como resultado de esto, el miedo se vuelve exagerado, si se compara con la posibilidad de peligro real. En estos casos, el miedo se traduce en pánico.
El miedo, normalmente, aparece ante fenómenos desconocidos, raros y nuevos, y el COVID 19 tiene precisamente estas características.
Para evitar la difusión de temores desproporcionados, que pueden dar lugar a diferentes formas de ansiedad individual y pánico colectivo, proponemos algunas conclusiones clave que pueden servir de ayuda, para evitar los posibles errores, tanto de exageración como de minusvaloración del problema.
- Si el pánico se vuelve colectivo, mucha gente sentirá ansiedad y querrán actuar para reducir esa ansiedad. Esto puede dar lugar a estrés y a un comportamiento irracional e improductivo.
- Cuanta más gente entre en pánico, menos atención se prestará a los datos objetivos. Y como consecuencia, la capacidad de tomar decisiones puede debilitarse.
- En términos generales, cuando hay muchas emociones, estas impiden un razonamiento correcto y dificultan la capacidad de ver las cosas desde una perspectiva correcta y amplia.
- Es difícil contrarrestar las emociones con un razonamiento racional, pero debemos tratar de confiar en datos objetivos. La regla fundamental es equilibrar el miedo percibido y el riesgo real.
- Nos preocupa nuestra salud y la de nuestros seres queridos. Por esto, tratamos de ver a las personas que nos importan como invulnerables. Sin embargo, la búsqueda de la invulnerabilidad es contraproducente, ya que nos hace sentir demasiado miedo. Además, somos incapaces de enfrentar desafíos futuros porque nos centramos demasiado en nosotros mismos.
- Evitar la búsqueda compulsiva de información. Como ya hemos visto, es normal y funcional sentir miedo ante una situación de riesgo nueva. Sentir ansiedad, buscar seguridad e información continuamente es normal y entendible durante estos días.
- Como ya hemos dicho en entradas anteriores, buscar fuentes de información fiables.
A continuación, proponemos algunos ejercicios para hacer frente a la ansiedad durante la pandemia de coronavirus:
- Acepta que es normal sentir estrés ahora. No te juzgues.
Unos de los primeros pasos para hacer frente a la ansiedad, es reconocer que es una respuesta normal y válida de mi cuerpo. Si interpretas la ansiedad como un mecanismo psicológico de defensa de tu organismo, puedes llegar a sentir menos miedo. El estrés viene a decirnos que necesitamos ajustar algo. El estrés es incómodo, y nuestra intención siempre es quitarlo. En lugar de luchar para eliminarlo vamos a intentar reconocerlo y manejarlo. Para eso es importante, no juzgarte por como te estás sintiendo o comportando, sino intentar aceptarlo. No seas tan duro/a contigo mismo/a ahora, no te juzgues por no estar bien ahora, es normal.
- Dedica tiempo a aprender nuevas técnicas de relajación.
- Haz deporte a diario.
- Crea tu propio mantra.
- Visualiza: la visualización es una técnica muy útil, que nos ayuda a prepararnos para retos importantes. La visualización consiste en experimentar a través de la imaginación cualquier situación que pudiera darse en la vida real.
- Mantén una rutina
- Habla con esa persona o personas que te hacen sentir mejor.
- Haz aquellas tareas que estás tratando de evitar.
Con todo lo expuesto anteriormente, queremos ayudar desde Alae Psicólogos a llevar de forma saludable el confinamiento. Ante cualquier duda, es muy importante consultar siempre con un profesional.